Es la consentida de mi casa. Le cedí, mejor dicho, tomó, el papel de la más chiquita y se le añadió el de la bebé de la familia. Las personas que tienen mascotas sabrás de lo que hablo. Pero esto va un poco más allá.
Pituka tiene un no sé qué que cambió permanentemente el estilo de vida en mi casa. Con decir que yo antes tenía pavor de cualquier perro sin importar raza o tamaño. Llega ella y ahora soy amante de los perros. Raro, ¿no?, pero así es esto. Y todo gracias a ella.
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